El sector bancario en España ha experimentado un crecimiento sostenido durante 2024, impulsado por el aumento de los tipos de interés y una gestión eficaz del riesgo de crédito. El incremento en los márgenes de intermediación se ha visto favorecido por el alza en los ingresos netos por intereses, derivados principalmente del crecimiento en la concesión de hipotecas y productos de financiación al consumo, en un entorno de elevada demanda. Esta mejora en los ingresos ha fortalecido los resultados operativos de las entidades financieras.
A nivel de gestión del riesgo, las tasas de morosidad se han mantenido estables, evidenciando un control eficiente sobre los activos dudosos y una política prudente de provisiones. Esta estrategia ha permitido a la banca mitigar los efectos adversos asociados a posibles deterioros crediticios, especialmente en un entorno macroeconómico caracterizado por incertidumbres derivadas de tensiones geopolíticas y proyecciones de desaceleración económica.
Sin embargo, las entidades financieras se enfrentan al desafío de preservar su rentabilidad ante un posible incremento en los costes de financiación y la presión sobre los márgenes que podría derivarse de una ralentización económica. Además, la competencia creciente de fintechs y neobancos continúa intensificando la necesidad de transformación digital en el sector bancario tradicional.
Las instituciones están destinando recursos significativos a la inversión en tecnologías avanzadas y en la mejora de sus plataformas digitales, con el objetivo de optimizar la experiencia del cliente, aumentar la eficiencia operativa y mantener su cuota de mercado. No obstante, estos desarrollos tecnológicos también implican un incremento en los costes operativos y la necesidad de gestionar los riesgos asociados a la ciberseguridad.
En el ámbito regulatorio, las entidades han tenido que adaptarse al impuesto extraordinario aplicado a las grandes corporaciones financieras en España, así como a las directrices del Banco Central Europeo (BCE), orientadas a mantener políticas monetarias restrictivas para contener la inflación en la eurozona. Estos factores regulatorios y fiscales han impactado en las estrategias financieras y en la planificación a medio plazo de las entidades.
En conjunto, el sector bancario español mantiene una posición de solidez financiera respaldada por márgenes sólidos, un control efectivo del riesgo crediticio y estrategias de digitalización avanzadas. No obstante, las perspectivas hacia 2025 están marcadas por un enfoque prudente, dadas las incertidumbres económicas y regulatorias que podrían afectar la estabilidad y rentabilidad del sector.
Tendencias de recursos humanos en el sector bancario
- Adopción de IA y tecnología en procesos de RRHH
- Modelos de trabajo híbrido y remoto
- Desarrollo de liderazgo digital
- Planificación estratégica de la fuerza laboral
- Cultura organizacional reforzada
- Bienestar y salud mental de los empleados
Estas tendencias muestran que el sector bancario se encuentra en plena transformación digital y con un enfoque en la experiencia del empleado. En un contexto de alta competitividad, la banca está invirtiendo en IA y en modelos híbridos para retener talento y mejorar la productividad. Este cambio se acompaña de una creciente preocupación por la cultura organizacional y el bienestar laboral, lo que permite responder a las demandas actuales del mercado de trabajo.
Descripción de perfiles Banca
- Atención al cliente online
- Gestor/a banca
- Asesor/a financiero/a
- Asesor/a banca privada
- Gestor/a comercial
- Especialista en banca digital
- Especialista en cumplimiento normativo
Puedes consultar aquí la tabla salarial del sector bancario.
Situación actual del sector seguros
El sector asegurador en España opera actualmente en un entorno caracterizado por una recuperación económica moderada y desafíos macroeconómicos significativos, incluidos factores como las tensiones geopolíticas y la desaceleración global. A pesar de estas condiciones, el mercado ha mostrado signos de resiliencia, especialmente en líneas de negocio como los seguros de vida y salud, que han experimentado un crecimiento sostenido en la captación de primas.
Este rendimiento positivo se atribuye, en parte, a la adopción estratégica de tecnologías avanzadas, como la inteligencia artificial (IA) y la analítica transaccional.
Paralelamente, el sector está integrando de forma progresiva criterios de sostenibilidad medioambiental, social y de gobernanza (ESG) en sus procesos estratégicos y operativos.
En el ámbito de la gestión de talento y recursos humanos, las aseguradoras están adoptando prácticas alineadas con las del sector bancario. Se prioriza la implementación de modelos laborales flexibles, la promoción de una cultura organizacional positiva y el desarrollo de políticas de bienestar enfocadas en la salud física y mental de los empleados. Estas estrategias son fundamentales para atraer y retener perfiles especializados en un mercado laboral altamente competitivo y en constante evolución.
Tendencias de recursos humanos en el sector seguros
- Capacitación en gestión de riesgos digitales
- Modelos híbridos con enfoque en atención al cliente
- Desarrollo de habilidades en IA para el análisis de datos
- Énfasis en la ética y la transparencia
- Inteligencia emocional en la atención de siniestros
Ante esta situación, la industria aseguradora parece estar priorizando la especialización técnica y la sensibilidad humana, adaptándose tanto a cambios tecnológicos como a nuevas exigencias de transparencia y sostenibilidad en sus productos.
Descripción de perfiles del sector seguros
- Agente
- Gestor/a de siniestros
- Analista de riesgos
- Especialista en seguros de vida o salud
- Analista de datos
- Especialista en cumplimiento normativo
- Gerente de sucursal
Puedes consultar la guía salarial del sector seguros en este enlace.